

El cambio climático aumenta en 2 °C la ola de calor en el norte de Europa
El cambio climático elevó en unos 2 °C la reciente ola de calor que afecta el norte de Europa, desafiando así los ecosistemas y a los criadores de renos en una región poco equipada para enfrentar estos fenómenos, declaró el jueves la red científica World Weather Attribution (WWA).
Finlandia, Noruega y Suecia experimentaron un clima excepcionalmente cálido durante dos semanas en julio, con temperaturas que superaron los 30 °C, y Finlandia registró 22 días consecutivos de temperaturas superiores a los 30 °C.
El calor persistente provocó desmayos durante eventos al aire libre, saturó y sobrecalentó los hospitales, causó incendios forestales, incrementó los ahogamientos e incluso llevó a los renos a buscar sombra en las ciudades, según el informe de una veintena de investigadores europeos.
"El cambio climático hizo que la ola de calor fuera aproximadamente 2 °C más cálida y al menos 10 veces más probable", afirmaron.
La ola de calor fue amplificada por la quema de combustibles fósiles, que libera carbono contribuyendo al calentamiento del planeta.
"El cambio climático está transformando fundamentalmente el mundo en el que vivimos," declaró Clair Barnes, investigadora del Centro de Política Ambiental en el Imperial College de Londres, en un comunicado.
"Los países con climas fríos como Noruega, Suecia y Finlandia ahora experimentan niveles de calor desconocidos", agregó.
Las conclusiones del informe llegan en un momento en el que se espera que las temperaturas vuelvan a rondar los 30 °C en algunas partes de la región el jueves.
La región nórdica es conocida por su clima más fresco y, normalmente, se expone poco o nada a las temperaturas elevadas.
"Nuestra infraestructura no está diseñada para resistir estas temperaturas extremas, y nuestra población envejecida es cada vez más vulnerable frente al calor peligroso", alertó Maja Vahlberg, consultora climática de la Cruz Roja Sueca, citada en el informe.
Los edificios de la región suelen estar bien aislados pero mal ventilados, explicó en una rueda de prensa.
Los investigadores también señalaron que estas temperaturas más cálidas amenazan los medios de subsistencia de los renos sami.
Los renos normalmente migran hacia altitudes más altas en verano, pero estas áreas ya no son refugios realmente frescos, lo que expone a los animales al calor y dificulta la búsqueda de alimento y agua.
Los inviernos más cálidos también generan más precipitaciones en lugar de nevadas, y los ciclos sucesivos de congelación y descongelación forman capas de hielo que impiden a los renos acceder al liquen para alimentarse.
La región ártica se calienta de dos a cuatro veces más rápido que otras regiones del planeta, según varios estudios.
H.Marquez--GM